- Buenos días, Vengo a solicitar un crédito.
- Encantado de atenderle, Don Rosero. Veamos…¿Qué cantidad solicita
- 1.000 Pesos.
- ¿Cómo? Por favor, Don Rosero, no es necesario solicitar un crédito por esa cantidad. Puede usted retirarlo de cualquiera de sus cuentas. ¿Se lo saco de su cuenta corriente o de su cuenta de ahorros?
-¡He dicho que quiero que se me conceda un crédito de 1.000 pesos. Si no me lo conceden, cancelo la cuenta corriente, la cuenta de ahorros, el fondo de inversiones, las tarjetas de crédito y me voy a otro banco!
- ¡Oh, no, Don Rosero, por favor! No me malinterprete. Desde luego, no tenemos ningún inconveniente en concederle su crédito, faltaría más. Bien, ¿qué plazo desea?
- Un mes.
- ¿Un mes?
-Bien, como es un plazo corto le aplicaremos un interés de un 10% pero por ser usted uno de nuestros mejores clientes, lo dejaremos en un 5% ¿Le conviene?
- Muy bien. Como garantía, quiero dejar el Mercedes.
- ¿El Mercedes? ¡Pero Don Rosero! Por esa cantidad no es necesario que nos deje una garantía. ¡Además, tratándose de usted sobra cualquier garantía!
- ¡He dicho que quiero dejar de garantía el Mercedes!¡Si no me lo aceptan cancelo la cuenta y todo lo demás, y me voy a otro banco!
- ¡Oh, no, no, Don Rosero! ¡Por favor! Aceptamos con mucho gusto su garantía, claro que sí, Puede dejar su Mercedes en el parking del Banco. Ahora, no tiene más que firmar aquí…Eso es, muy bien Don Rosero… Muchas gracias y a su disposición, hasta pronto.
Don Rosero llega a casa y se dirige emocionado a su mujer:
- ¡Marta! ¡Ya nos podemos ir de vacaciones! ¡Encontré parking vigilado para el Mercedes durante un mes! ¡¡¡Y POR SOLO 1.005 PESOS
MORALEJA: No es que los Pastusos sean amarrados,
SON UNOS COMERCIANTES LOS BERRACOS.
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